///// APRENDIENDO DE LAS VEGAS/////

Las Vegas es la fascinación del ser humano por los límites, por los extremos, por los riesgos. Es una vocación por lo incontrolado, por lo salvaje, por lo primitivo. Es, al fin y al cabo, un monumento a los INSTINTOS.

Y es normal. No hay nada en el mundo que genere más dinero que los instintos. No hay de hecho nada excesivamente “racional” que mueva tanto capital como el miedo , la belleza, el amor , el simple deseo, o el riesgo.

Las Vegas, no como lugar sino como concepto , necesita de la relajación de la ley para existir. Es, y vive de la EXCEPCIONALIDAD.

No es casualidad entonces que en una época de EXCEPCIONALIDADES GENERALIZADAS como la actual (recuerden que todos los recortes ,reformas, etc siempre han sido calificados de excepcionales )se decida incluso recortar la propia ley para permitir que una pequeña versión de esta ciudad-estado contemporánea entre en Europa usando a una España pobre y por tanto abierta a cualquier nueva excepcionalidad. No es casualidad incluso que una esquizofrenia colectiva que haya llegado a creerse que dicho proyecto fuera a generar 230.000 puestos de trabajo, haya podido llegar incluso a JUSTIFICAR su necesidad.

Y es que épocas como esta , parecen abrir viejas puertas. Se reabren debates caducos, superados, asumidos, y se plantean manidas cuestiones. Se vuelve a pensar que el fin puede llegar a justificar los medios, que es posible oficializar que no todos somos iguales ante la ley, y la ciudad deja de ser ciudad para convertirse en espacio disponible.

Pero por encima de todo se toman decisiones excepcionales, tomadas en épocas excepcionales, pero perpetuas en el tiempo. Madrid o Barcelona habrán construido dentro de poco una catedral a la incapacidad, un monumento que expresará en cada una de sus esquinas nuestra más absoluta falta de imaginación para saber salir de este embrollo de una manera sustanciada, sostenible y elegante. Y quedará, lejos de épocas excepcionales, en el tiempo y en la memoria. Esa misma memoria que recordará que soluciones como estas también son posibles, que sabrá que hecho una vez, será más fácil hacerlo la segunda.

Y es que hay momentos en los este sistema, todos los sistemas, mandan mensajes inequívocos de agonía a los que viven en ellos. Eurovegas es, por encima de un negocio, el mensaje de honda agonía de una moribunda “manera de hacer las cosas”. Una forma de manejar la sociedad que ha perdido absolutamente toda la imaginación y todos los caminos.

Quizás vaya siendo hora de que analicemos lo que “ideas” como esta generaron en el pasado. Quizás vaya siendo hora de que, verdaderamente, aprendamos de Las Vegas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario